¿Cuál es el fin último de la vida? parece ser un asunto aparentemente etéreo que bien podría considerarse de orden exclusivamente filosófico o teológico. Por otra parte, el alcance de unos fines, ha pasado a ser reducido al cumplimiento de logros propio del lenguaje del marketing y el emprendimiento. Pero no todos los fines son etéreos; una pregunta por los fines alude de manera intrínseca a la naturaleza antropológica que desde su genealogía se ha cuestionado por: ¿Qué hace la gente, qué dice la gente, y qué dice la gente de lo que hace? De igual modo, los logros de las personas se inscriben dentro de unos valores, una cultura, y la narración de su propia vida. Es por todo lo anterior, que más allá de concebir los fines como una preocupación existencial, o una noción al servicio del mercadeo new age, he decidido transformarlos en una pregunta de investigación basada en una población concreta. Así mismo, busco recuperar un campo que le pertenece a la antropología a través de este estudio exploratorio de los fines de un grupo de adultos mayores en la ciudad de Bogotá.